Casa con Vistas al Mar en venta en Estepona

Villa independiente frente al mar con una ubicación impresionante en una parcela elevada en la costa sur de Estepona. Con vistas incomparables y un estilo de vida codiciado, esta preciada villa ha sido cuidadosamente mantenida por una sola familia desde su construcción.
Distribuida en dos niveles, la propiedad cuenta con magníficas zonas ajardinadas y acceso directo al paseo marítimo adyacente y a la playa de arena.
El paseo marítimo fluye con gracia en ambas direcciones y conduce a Estepona y Marina de Casares.
Escondido al final de una calle tranquila, el acceso a la propiedad se facilita a través de un aparcamiento en la calle cercano o una notable entrada a través del paseo marítimo. El nivel superior alberga el espacio principal, que cuenta con una luminosa y acogedora sala de estar adornada con una chimenea. Elevado a la perfección, el mirador presenta impresionantes vistas panorámicas que abarcan el mar, Gibraltar y África. La cocina, actualmente independiente, espera modernización pero es totalmente funcional. Dos habitaciones dobles adornan este nivel, cada una con vistas al mar, acceso al exterior y baños en suite.
En el nivel inferior, se despliega el principal oasis al aire libre, que cuenta con un jardín bien cuidado con múltiples áreas para sentarse con encanto, una pérgola para los días de sol y una pequeña piscina privada. Un pintoresco sendero serpentea entre parterres de flores y conduce directamente a la playa. El interior del nivel inferior está configurado para proporcionar alojamiento independiente con acceso independiente, que cuenta con una cocina de estilo abierto, un amplio dormitorio doble y un baño. Hay un amplio espacio disponible para una mayor personalización, que podría albergar un cuarto dormitorio, espacio adicional para vivir u otras comodidades.
Convenientemente situada, la propiedad está a sólo 5 minutos en coche de supermercados, cafeterías y a otros 5 minutos del pintoresco centro de la ciudad de Estepona. El aeropuerto de Málaga es fácilmente accesible en 50 minutos en coche, lo que facilita las visitas frecuentes.